Caso práctico 3: El viaje por la salud de Jack
Jack, un hombre de 36 años, padre de dos hijos, sufría insomnio crónico, ansiedad y falta de concentración en el trabajo. Había empezado un nuevo régimen de ejercicio y dieta, que incluía batidos de proteínas, pero pronto empezó a experimentar dolores musculares y articulares, hinchazón abdominal y malestar.
Resultados iniciales:
Tras consultar a su médico, Jack fue diagnosticado de fibromialgia, una enfermedad caracterizada por dolor musculoesquelético crónico, falta de sueño, disfunción cognitiva y dolor generalizado. Le recetaron antidepresivos y analgésicos, que le hicieron ganar peso y sentirse mareado, a pesar de aliviarle en parte el dolor.
Segunda opinión:
Perturbado por su diagnóstico, Jack buscó una segunda opinión conmigo. Mi análisis de las causas principales y las pruebas especializadas revelaron que Jack no había sido atendido previamente por hipotiroidismo, una tiroides hipoactiva que puede causar fatiga, dolor muscular, rigidez, deterioro de la memoria y otros síntomas.
Hallazgos adicionales:
También descubrí que las glándulas suprarrenales de Jack estaban desequilibradas, lo que hacía que sus niveles de cortisol aumentaran a medianoche, interrumpiendo su sueño. Las pruebas de sensibilidad alimentaria mostraron reacciones graves a los plátanos, las judías y el batido de proteína en polvo que Jack consumía, lo que contribuía a su dolor abdominal e hinchazón. Jack también tenía carencias de omega-3, magnesio y otras vitaminas y minerales importantes, lo que le provocaba dificultades para dormir, depresión, problemas de humor y dolor.
Mi plan de acción:
Prescribí un plan de salud personalizado para Jack, empezando por un protocolo nutricional de eliminación para limpiar su organismo de alimentos inflamatorios y sustancias químicas. También recomendé suplementos de alta calidad para tratar las deficiencias de Jack, como magnesio, curcumina, aceite de pescado y hierbas como la albahaca santa para ayudar a las glándulas suprarrenales y controlar los picos de cortisol. También recomendé clases de meditación para combatir la ansiedad, favorecer un sueño reparador y aumentar el bienestar físico y emocional.
Resultados:
Jack siguió diligentemente mis pautas de nutrición y estilo de vida, y su dolor se disipó casi inmediatamente después de comenzar el protocolo de eliminación. Su sueño mejoró y la ansiedad disminuyó significativamente, lo que le permitió tener una nueva y mejor perspectiva de la vida. Jack está ahora lleno de energía para embarcarse en nuevas aventuras con sus hijos.